Sábado 3 de Junio de 2017. San Carlos Lwanga Juan 21. 20-25 Al volverse, Pedro vio que detrás venía el discípulo a quien Jesús quería mucho, el mismo que en la cena había estado a su lado y le había preguntado: “Señor, ¿quién es el que te va a traicionar?” Cuando Pedro lo vio, preguntó a Jesús: —Señor, y a este, ¿qué le va a pasar? Jesús le contestó: —Si quiero que él permanezca hasta que yo vuelva, ¿qué te importa a ti? Tú sígueme. Por esto corrió entre los hermanos el rumor de que aquel discípulo no moriría. Pero Jesús no dijo que no moriría. Lo que dijo fue: “Si quiero que él permanezca hasta que yo vuelva, ¿qué te importa a ti?” Este es el mismo discípulo que da testimonio de estas cosas, y que las ha escrito. Y sabemos que dice la verdad. Jesús hizo muchas otras cosas; tantas que, si se escribieran una por una, creo que en todo el mundo no cabrían los libros que podrían escribirse --------------------------------------------------------------------------------------------------------- Pongámonos en el lugar de Juan, el discípulo que Jesús tanto ama. … Jesús nos ama de modo particular … somos sus preferidos … nos defiende … ¿qué sentimos ante ello? … Se lo contamos a Jesús en una oración muy personal, sencilla y directa … como un amigo habla a otro amigo |