Jeremías 7, 23-28

"Escuchar y obedecer a Dios"

Así habla el Señor:

Ésta fue la orden que les di a sus padres el día que los hice salir de Egipto: “Escuchen mi voz, así Yo seré su Dios y ustedes serán mi Pueblo; sigan por el camino que Yo les ordeno, a fin de que les vaya bien”.

Pero ellos no escucharon ni inclinaron sus oídos, sino que obraron según sus designios, según los impulsos de su corazón obstinado y perverso; se volvieron hacia atrás, no hacia adelante.

Desde el día en que sus padres salieron de Egipto hasta el día de hoy, Yo les envié a todos mis servidores los profetas, los envié incansablemente, día tras día. Pero ellos no me escucharon ni inclinaron sus oídos, sino que se obstinaron y obraron peor que sus padres.

Tú les dirás todas estas palabras y no te escucharán; los llamarás y no te responderán. Entonces les dirás: “Ésta es la nación que no ha escuchado la voz del Señor, su Dios, ni ha recibido la lección. La verdad ha desaparecido, ha sido arrancada de su boca”.

Hoy el Señor nos habla a través del profeta Jeremías con un mensaje fuerte y claro: "Escuchen mi voz y yo seré su Dios, y ustedes serán mi pueblo". Pero también nos muestra la gran tristeza de Dios cuando su pueblo se cierra, no escucha, y sigue sus propios caminos.

📖 1. Contexto bíblico e histórico del pasaje

Jeremías es un profeta que vivió en tiempos difíciles, cuando el pueblo de Israel se había alejado de Dios. Aunque iban al templo y hacían sacrificios, no vivían según su voluntad. Dios, por medio de Jeremías, les recuerda que lo más importante no son los ritos, sino la obediencia a su Palabra.

El pueblo, sin embargo, endureció su corazón y no quiso escuchar. Se confiaban en que, por ser el "pueblo elegido", todo estaba bien. Pero Dios les dice que sin fidelidad y obediencia, su relación con Él se debilita.

🌿 2. Resumen del texto en lenguaje actual

Dios nos dice: "Lo más importante no es solo rezar, sino escucharme y vivir según mi voluntad".

Hoy, también nosotros podemos caer en lo mismo: asistimos a misa, rezamos, pero... ¿escuchamos realmente a Dios? ¿Vivimos lo que nos pide?

Este pasaje nos recuerda que la fe no es solo una costumbre o una tradición. Es una relación viva, que se expresa en la escucha y en la obediencia a Dios.

❤️ 3. Tema central del pasaje

El mensaje principal es claro: Dios nos habla, pero depende de nosotros escucharlo y obedecerlo.

Dios quiere un pueblo que no solo lo invoque con los labios, sino que le obedezca con el corazón. El verdadero amor a Dios no está solo en palabras bonitas o en prácticas religiosas, sino en una vida transformada por su Palabra.

❓ 4. Preguntas para reflexionar y aplicar el mensaje

• ¿Estoy realmente escuchando a Dios o solo hago lo que me conviene?

• ¿Mi fe es solo costumbre o es una relación viva con el Señor?

• ¿Cómo puedo abrir más mi corazón para obedecer la voluntad de Dios en mi vida diaria?

• ¿Qué decisiones o actitudes debo cambiar para vivir más fielmente su Palabra?

🙏 5. Oración final inspirada en el pasaje

Señor,
tú nos hablas cada día,
pero muchas veces nuestros oídos están cerrados
y nuestro corazón endurecido.

Enséñanos a escucharte de verdad,
a obedecer tu voz con humildad y confianza.
Queremos ser un pueblo fiel,
no solo de palabras, sino de acciones.

Danos un corazón dócil,
un espíritu abierto,
y la valentía para seguir siempre tu camino.

Amén.