Reflexión.

Pensemos en aquellas personas que no conocen a Jesús. ... Aquellos que están cerca de nosotros y no sienten a Jesús en su corazón ... Le pedimos al Señor por ellos. … También traemos a nuestra oración hoy  a quienes si lo conocen pero no lo hacen vida ... Elevemos una oración por ellos para que puedan sentirte Señor ...  Los mantenemos en nuestro corazón con amor, ... con misericordia ... pidamos por ellos para que actuando según el Evangelio sean felices y vivan mejor.

Coloquio.

Señor Jesús, contemplamos nuestras vidas, recorremos nuestra historia y tenemos tanto que agradecer. Tanto bien recibido. Tantos milagros que has obrado en nuestra existencia. Al mismo tiempo, miramos con vergüenza tantas veces que no hemos reconocido tu intervención amorosa y misericordiosa y hemos caído en las tentaciones.  Perdón, Señor. Apelamos a tu infinita misericordia para que en el momento en que revises nuestras vidas tengas más en cuenta las veces en que hemos puesto en práctica lo que te hemos escuchado que las veces que hemos actuado equivocadamente. Perdona también, Señor, aquellos a quienes hemos transmitido tu palabra, que es la palabra y el deseo del Padre y que no nos han escuchado, pues cuando rechazan lo  que les decimos de ti, te rechazan también a ti y al Padre Dios. Ayúdanos, Señor, a que nuestra conversión de muchos frutos y con ello gozar de la vida eterna contigo. Amén