“Cumplir la ley con el corazón”
Jesús dijo a sus discípulos:
No piensen que vine para abolir la Ley o los Profetas: Yo no he venido a abolir, sino a dar cumplimiento. Les aseguro que no quedarán ni una i ni una coma de la Ley sin cumplirse, antes que desaparezcan el cielo y la tierra.
El que no cumpla el más pequeño de estos mandamientos, y enseñe a los otros a hacer lo mismo, será considerado el menor en el Reino de los Cielos. En cambio, el que los cumpla y enseñe, será considerado grande en el Reino de los Cielos.
Hoy el Señor Jesús nos habla en el Evangelio de algo muy importante: la Ley de Dios, esa que el pueblo de Israel recibió desde antiguo, y que Jesús no vino a eliminar, sino a llevar a su plenitud. Pero atención: Él nos invita a vivirla no solo con normas, sino con amor, con profundidad, con el corazón.
1. 📜 Contexto bíblico e histórico del pasaje
Jesús está predicando el Sermón del Monte, ese discurso tan lleno de sabiduría donde nos enseña las bienaventuranzas y cómo debe vivir el que quiere seguirlo. En este momento, algunos pensaban que Jesús venía a dejar atrás la ley de Moisés. Pero Jesús aclara: “No vine a abolir la Ley, sino a darle cumplimiento”. Él no rechaza la tradición, sino que la lleva a su sentido más profundo: amar a Dios y al prójimo.
2. 🌾 Resumen del texto adaptado a la realidad de hoy
En palabras simples, Jesús nos dice:
“No se trata solo de cumplir mandamientos por cumplir, sino de vivirlos con amor verdadero. Cada palabra de Dios cuenta. No basta con saber la ley, hay que vivirla con el corazón”.
Hoy, también nosotros podemos caer en una fe solo de costumbre, solo de normas. Jesús nos invita a ir más allá, a una fe viva y profunda, hecha de amor, justicia y misericordia.
3. ❤️ El tema central del Evangelio
El corazón del mensaje es este: Jesús quiere que vivamos la fe con profundidad, no superficialmente. No se trata solo de “hacer lo que hay que hacer”, sino de hacerlo con sentido, con amor, con fidelidad al querer de Dios. Ser verdaderamente fieles a Dios es vivir su voluntad en lo pequeño y en lo grande, con el alma entera.
4. ❓ Preguntas simples y profundas para aplicar el mensaje a la vida
¿Estoy viviendo los mandamientos como una rutina o como un camino de amor?
¿Me esfuerzo por vivir lo que creo, no solo por fuera, sino también por dentro?
¿Soy testimonio para otros de una fe vivida con alegría, profundidad y fidelidad?
¿Hay algún “detalle” del Evangelio que he olvidado vivir en mi vida cotidiana?
5. 🙏 Oración final inspirada en el Evangelio
Señor Jesús,
tú nos enseñas a vivir la ley de Dios con el corazón,
a no quedarnos solo en las apariencias,
sino a buscar siempre lo que más agrada al Padre.
Haznos fieles en lo pequeño y en lo grande.
Enséñanos a vivir tu Palabra con alegría,
y que cada uno de nuestros gestos sea una señal de tu amor en el mundo.
Danos un corazón sencillo, profundo y obediente,
para cumplir tu voluntad con humildad y entrega.
Amén.