Mateo 18. 12-14

El Padre del cielo no quiere que se pierda ni uno de estos pequeños

12 ¿Qué les parece? Si un hombre tiene cien ovejas, y una de ellas se pierde, ¿no deja las noventa y nueve restantes en la montaña, para ir a buscar la que se extravió? 13 Y si llega a encontrarla, les aseguro que se alegrará más por ella que por las noventa y nueve que no se extraviaron. 14 De la misma manera, el Padre que está en el cielo no quiere que se pierda ni uno solo de estos pequeños 

Reflexión.

Recorramos nuestra vida … ¿cuándo hemos sentido que somos como una oveja que se aparta del rebaño … ¿porqué hemos sentido que nos apartamos de Jesús?... ¿qué fue lo que hicimos? … ¿a quién afectó? … Meditemos sobre como el Señor lo único que quiere es acogernos en sus brazos… misericordiosamente… ¿qué sentimos?  

Coloquio.

Te damos gracias, Señor Jesús, por preocuparte de nosotros, especialmente cuando abandonamos tu rebaño, con nuestros egoísmos y rencores. Gracias por salir a buscarnos y llevarnos de vuelta para ser más fraternos, solidarios y misericordiosos. Gracias, Señor.