Lunes 24 de abril 2023.  San Fidel de Sigmarigen

Juan 6, 22-29

Trabajen por el alimento que perdura

22 Al día siguiente, la multitud que se había quedado en la otra orilla vio que Jesús no había subido con sus discípulos en la única barca que había allí, sino que ellos habían partido solos. 23 Mientras tanto, unas barcas de Tiberíades atracaron cerca del lugar donde habían comido el pan, después que el Señor pronunció la acción de gracias. 24 Cuando la multitud se dio cuenta de que Jesús y sus discípulos no estaban allí, subieron a las barcas y fueron a Cafarnaún en busca de Jesús. 25 Al encontrarlo en la otra orilla, le preguntaron: "Maestro, ¿cuándo llegaste?". 26 Jesús les respondió: "Les aseguro que ustedes me buscan, no porque vieron signos, sino porque han comido pan hasta saciarse. 27 Trabajen, no por el alimento perecedero, sino por el que permanece hasta la Vida eterna, el que les dará el Hijo del hombre; porque es él a quien Dios, el Padre, marcó con su sello". 28 Ellos le preguntaron: "¿Qué debemos hacer para realizar las obras de Dios?". 29 Jesús les respondió: "La obra de Dios es que ustedes crean en aquel que él ha enviado".

Reflexión.

¿Qué es lo que le hemos pedido a Jesús? … ¿qué le pediríamos hoy? … ¿cuáles de nuestras peticiones son por la comida que se acaba y cuáles por la que permanece? … En un momento de intimidad con Jesús atrevámonos a preguntarle: ¿Qué debemos hacer para hacer la voluntad de Dios? … ¿Cuál será la voluntad de Dios con nosotros, … ahora, … aquí? … Todo parte por creer en Jesús, creer en su mensaje de amor, perdón y servicio … ¿Lo estamos llevando a cabo? … nuestra vida está impregnada de amor, perdón y servicio? … ¿dónde nos cuesta más? … ¿Cómo mejorar eso? … le pedimos ayuda al Señor para encontrar y hacer su voluntad.

Coloquio.

Señor Jesús, creemos en ti. Te seguimos en tu Evangelio. Tu proyecto de vida nos entusiasma y apasiona. Aliméntanos, Señor, de generosidad, de misericordia y de compasión. Multiplica en nosotros la paz, la solidaridad y la fraternidad. Con ellos podemos conservar y mejorar nuestra vida terrenal y eterna. Queremos hacer la voluntad de Dios y para encontrarla nos tomamos de tu mano, de tus enseñanzas. Ayúdanos a no soltarnos, Señor. Ayúdanos a caminar contigo en nuestra vida con fe en Dios, amándolo y amando y sirviendo a nuestros hermanos y hermanas. Que tu presencia resucitada nos conduzca a encontrar y hacer lo que Dios quiere de nosotros. Amén