Lunes 6 de febrero de 2023.  San Pablo Miki y Santa Doris

Marcos 6, 53-56

Lo tocaban y quedaban sanados

53 Después de atravesar el lago, llegaron a Genesaret y atracaron allí. 54 Apenas desembarcaron, la gente reconoció en seguida a Jesús, 55 y comenzaron a recorrer toda la región para llevar en camilla a los enfermos, hasta el lugar donde sabían que él estaba. 56 En todas partes donde entraba, pueblos, ciudades y poblados, ponían a los enfermos en las plazas y le rogaban que los dejara tocar tan sólo los flecos de su manto, y los que lo tocaban quedaban curados

Reflexión.

Contemplemos la escena… la barca… el lago… la gente… Jesús sanando… Tanta gente con necesidades del alma y del  cuerpo …  tantos que necesitan un cambio para ser felices … tantos que quisiera recibir una buena noticia …  ¿a quienes les llevaríamos nosotros para que los sane? … Amigos, … familiares … o … yo mismo, ¿… medito sobre de qué podría necesitarme curar yo? … ¿qué necesito cambiar? … Imaginemos que tocamos el borde de su capa… ¿para qué? … ¿qué me llevaría a mi a tener ese contacto más íntimo con Jesús? … ¿qué me puede hacer querer tener un contacto más íntimo con El? … ¿Cómo encausar esa relación profunda con Jesús? 

Coloquio.

Señor Jesús, te presentamos a tanta gente  enferma en nuestros tiempos. Familiares, amistades, gente que conocemos y a lo mejor, nosotros mismos. Las enfermedades les impiden vivir felices, les impiden tener vida plena.  Con fe los ponemos en tu presencia.  Solo tú sabes cuál es el mejor desarrollo de sus enfermedades. Que se curen ya, que evolucione su problema o que sea el preludio del encuentro con el Padre. Solo tú sabes. Nosotros queremos que dejen de sufrir y te pedimos por todos ellos.  Que recuperen su salud, Señor. Te pedimos por ellos.  Y a los que estamos sanos, aumenta nuestra fe para presentarte a nuestros enfermitos con la esperanza de que sanarán pronto. Amén.